Entre todos los factores «wow» que nos ha dejado Final Fantasy XVI desde su primer anuncio, uno del que más se habla sin dudas es su increíble presentación, y detrás de todo está su director de arte, Hiroshi Minagawa, quien reveló recientemente cómo se dio con este estilo artístico y cuáles fueron sus inspiraciones. Antes de trabajar en Final Fantasy XVI, Minagawa formó parte del equipo de FFXIV, aunque siendo éste un MMORPG, la dirección artística cambió drásticamente cuando pasó a su nuevo proyecto offline para un solo jugador:
Me llamaron durante una etapa muy temprana del desarrollo del juego. Fue tan pronto, que pude hablar anticipadamente con Hiroshi Takai, el director de FFXVI, sobre qué tipo de mundo íbamos a crear, qué esencia iba a transmitir, y fui parte del proceso creativo a partir de ese punto. Nos congelamos por completo cuando Takai dijo ‘Queremos tener algo que refleje el sentimiento de Game of Thrones’, esa clase de altos estándares en fantasía que verías en esa especie de programas y medios visuales.
Minagawa explicó con mayor detalle porqué FFXVI no podía seguir la misma idea que FFXIV, especificando que un MMORPG debe impresionar mostrando varias cosas en sus escenarios al mismo tiempo, abrumando al jugador y otorgándole un gran deseo de explorar hasta el último rincón, pero debido a esto, se sacrificaba el detalle de cada elemento, algo que no se podía hacer en FFXVI, donde los gráficos debían lucir «en otro nivel», profundizando la complejidad incluso del más mínimo detalle.
Tomando estas ideas en cuenta, Minagawa y el resto del equipo creativo decidieron inspirarse fuertemente en Game of Thrones, la popular serie de fantasía medieval. La razón de esto fue asumir el alto estándar de la producción transmitida por HBO que se mostró a lo largo de sus 8 temporadas; una fantasía sin igual que te hace olvidar el mundo en el que vives día con día, transportándote a otra época sin que te sientas forzado en el proceso.