Tras la confirmación de la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft, el controvertido CEO Bobby Kotick ha confirmado que permanecerá al mando de la compañía creadora de Call of Duty hasta finales de este 2023.
En un correo electrónico a todos los empleados de Activision Blizzard, Kotick dijo que el jefe de Xbox, Phil Spencer, le había pedido que se quedara como CEO hasta finales de este año, sugiriendo una salida en 2024.
«He dicho durante mucho tiempo que estoy totalmente comprometido a ayudar con la transición», dijo Kotick. «Phil me ha pedido que me quede como CEO de ABK, reportándole a él, y hemos acordado que lo haré hasta finales de 2023. Ambos esperamos trabajar juntos en una integración sin problemas para nuestros equipos y jugadores.»
Kotick puede aún ganar cientos de millones gracias a la impresionante adquisición de Microsoft por valor de 69 mil millones de dólares (unos 65 mil millones de euros) de Activision Blizzard. El año pasado, Bloomberg informó de que el consejero delegado podría recibir 520 millones de dólares de la venta. En un documento presentado ante la Comisión de Valores en 2022, Activision Blizzard indicó que Kotick recibiría 14,4 millones de dólares en concepto de indemnización si era despedido o abandonaba la empresa en diversas circunstancias en el plazo de un año tras un cambio de control en la empresa. En ese momento, Kotick poseía 4,3 millones de acciones y tenía derecho a adquirir otros 2,2 millones mediante el ejercicio de opciones, lo que potencialmente podría valer 520 millones de dólares en total al precio de 95 dólares por acción ofrecido por Microsoft.
Kotick deja Activision después de 30 años como CEO y con un claro éxito financiero bajo su mandato, pero su tiempo en la cima no ha estado exento de polémica. Los empleados se han quejado de sexismo y de una cultura de trabajo tóxica, e incluso han abandonado la empresa porque Kotick no informó al consejo de administración de las acusaciones de violación y otras faltas graves.
El Departamento de Empleo y Vivienda Justa de California demandó a Activision Blizzard en julio del año pasado, y la semana pasada también fue objeto de otra queja por parte de la Junta Nacional de Relaciones Laborales formulada por el sindicato de Comunicaciones de América.