Análisis de Donkey Kong Country Returns HD

Originalmente lanzado en 2010 para Wii, Donkey Kong Country Returns llegó en un momento clave para Nintendo, cuando la consola de la gran N estaba en su apogeo con una visión orientada a atraer a un público más amplio. Con la Wii, Nintendo apostó por experiencias innovadoras alejadas de la pura potencia de hardware, lo que le permitió tener un éxito comercial enorme, pero a la vez provocó que la compañía fuera vista por muchos como una empresa dirigida solo a los jugadores casuales. Este prejuicio, junto al uso de los controles de movimiento, hizo que algunos de sus títulos más difíciles, como Donkey Kong Country Returns, pasaran desapercibidos. Aunque el juego fue elogiado por la crítica, no logró un éxito masivo, vendiendo 6 millones de copias, algo que, para muchos, no reflejó su calidad. En 2013, Nintendo decidió relanzarlo para Nintendo 3DS, agregando contenido adicional y dándole una segunda vida a esta obra maestra de Retro Studios en una consola portátil.

La pregunta más obvia al ver este nuevo relanzamiento en Nintendo Switch es: ¿por qué hacerlo? Algunos pueden pensar que es simplemente una estrategia para mantener la biblioteca de la consola activa mientras esperan su sucesora, pero la verdad es que Nintendo no necesita ampliar aún más el ya extenso catálogo de Switch. Lo que busca es preservar estos clásicos que, por alguna razón, podrían perderse con el tiempo. Además, dado que recientemente celebramos el 30º aniversario de Donkey Kong Country y Switch ya cuenta con Tropical Freeze, la secuela directa de Returns, tiene sentido completar esta operación de rescate antes de embarcarse en nuevos proyectos con el querido gorila.

¿Qué ofrece esta versión HD respecto a las anteriores? En términos generales, no hay grandes cambios, pero la adaptación de Forever Entertainment cumple su cometido de manera respetuosa. Entre las principales novedades, destaca un nuevo nivel de dificultad, llamado modo aventura, que no cambia la estructura básica del juego, pero hace que la experiencia sea más accesible. Aumenta la energía de los personajes y permite llevar más objetos, lo que facilita superar los niveles más difíciles. Esta opción es perfecta tanto para jugadores que buscan un desafío más ligero como para los que disfrutan de la dificultad clásica de las plataformas.

Una de las preguntas más comunes sobre Donkey Kong Country Returns es: ¿Es realmente tan difícil? La respuesta es, en su mayoría, sí. Aunque muchos juegos han seguido el legado de la saga, la versión de Retro Studios sigue siendo uno de los platforms 2D más desafiantes de su época. Sin embargo, la dificultad es siempre subjetiva. Retro Studios hizo un trabajo excepcional con el diseño de los niveles, creando una curva de dificultad justa que no se siente arbitraria ni excesiva. Aunque algunos niveles son muy complejos, nunca se sienten injustos, y la clave está en la paciencia, ya que el juego nunca te obliga a tomar decisiones apresuradas.

Lo que realmente hace que Donkey Kong Country Returns haya resistido la prueba del tiempo son los detalles meticulosos en su diseño. Con 80 niveles, cada uno está repleto de secretos, piezas de puzzle escondidas, letras KONG y desafíos de tiempo para los completistas. Además, a medida que avanzas en el juego, se desbloquean más desafíos que pondrán a prueba tus habilidades al máximo. Cada nivel está diseñado para ofrecer una experiencia única y variada, sin recurrir a soluciones repetitivas, lo que mantiene la frescura del juego.

En comparación con los títulos anteriores de la saga, hay algunos cambios importantes en la jugabilidad. En lugar de perder todas las vidas como en los clásicos de los 90, ahora Donkey Kong tiene una barra de energía que se puede aumentar cuando Diddy se sube a su espalda, dándole la capacidad de planear con su jetpack en ciertas secciones del juego. Sin embargo, en el modo individual, Diddy solo actúa como apoyo, mientras que en modo cooperativo se puede controlar de manera independiente. Los Kremlings, los enemigos clásicos de la saga han sido reemplazados por los Tiki Tak, una tribu que roba todas las bananas al inicio del juego. Este cambio, aunque necesario para refrescar la historia, no tiene el mismo impacto que los antagonistas anteriores.

En cuanto al aspecto visual, la dirección artística de Donkey Kong Country Returns HD es más brillante y limpia, lo que contrasta con la atmósfera más sombría y orgánica de la trilogía original de Rare. Este cambio, aunque comprensible, no logra capturar el mismo estilo sucio y rudo que definió los primeros títulos de la saga. Para los fanáticos de la saga clásica, esto puede ser un punto a favor o en contra.

Técnicamente, Forever Entertainment ha realizado una conversión bastante básica, actualizando las texturas a alta resolución, pero sin hacer grandes cambios. Aunque no había necesidad de una revisión profunda, especialmente dado el buen estado del original y el poder de la Switch, se nota que este relanzamiento empieza a mostrar su edad, especialmente cuando se compara con Tropical Freeze, que tiene un acabado visual más pulido. Las animaciones, por otro lado, están bien realizadas, pero los modelos de personajes se sienten algo más rígidos en comparación con los de Tropical Freeze. A pesar de esto, el juego sigue siendo visualmente atractivo y funciona perfectamente bien en la Switch.