En Rift of the Necrodancer, el nuevo juego de Brace Yourself, acompañamos a Cadence en una nueva aventura llena de batallas y danza a través de portales dimensionales. Puede parecer confuso al principio, pero sigue leyendo nuestra reseña: ¡todo tiene sentido y valdrá la pena! Rift of the Necrodancer es un juego de ritmo que se podría describir como una mezcla entre Guitar Hero y Crypt of the Necrodancer. En lugar de las clásicas notas de guitarra, aquí enfrentamos a monstruos como blobs, esqueletos y murciélagos que bajan por el mástil de una guitarra. Cada uno tiene un patrón de movimiento distinto, y la dificultad aumenta rápidamente. Aunque los primeros niveles pueden parecer fáciles, el juego se complica y llega a ser casi imposible en los niveles más altos.

A diferencia de Cadence of Hyrule o Crypt of the Necrodancer, donde la perspectiva era desde arriba y el ritmo dictaba el movimiento, en Rift of the Necrodancer no controlamos a Cadence con su pala, sino que tomamos una guitarra. El objetivo es seguir el ritmo y dar el input correcto (izquierda, derecha o arriba) mientras derrotamos a los monstruos. Aunque parece sencillo, la sincronización y los patrones de los enemigos nos pondrán a prueba. Cada tipo de monstruo tiene su propio patrón. Por ejemplo, un slime avanza una casilla por compás, mientras que los murciélagos requieren más acción y saltan de barra en barra. A medida que avanzamos, veremos una gran cantidad de criaturas moviéndose a la vez, lo que hace que la clave para sobrevivir sea convertirnos en uno solo con el ritmo. La dificultad es alta, y el juego no es para los débiles de corazón.

El juego ofrece varias modalidades, siendo los portales rítmicos la principal. En estos portales, podemos practicar con una amplia variedad de canciones en diferentes niveles de dificultad, desde fácil hasta casi imposible. Además, el juego no tiene fin: las canciones se repiten en los portales, y siempre puedes seguir practicando. Si buscamos una experiencia más narrativa, la modalidad Historia nos permitirá descubrir qué sucedió con Cadence y el origen de los portales. Aunque la trama no es demasiado profunda, cumple su función, además de darnos una excelente excusa para disfrutar del impresionante estilo artístico del juego. El diseño artístico de Rift of the Necrodancer es encantador y perfectamente acorde con los juegos previos de Brace Yourself. Los personajes tienen un estilo caricaturesco, con influencias de manga y anime en algunos momentos.

El estilo chibi destaca en los minijuegos, y Cadence, aunque ha cambiado su diseño, sigue siendo una heroína rebelde con un toque pixelado. Además, las transiciones entre los portales incluyen momentos tipo visual novel que refuerzan la atmósfera del juego. En un juego de ritmo, la música es esencial, y Rift of the Necrodancer no decepciona. Su banda sonora es increíblemente variada, pasando del piano clásico al metal, y de ahí al dance. Las canciones son originales, pegajosas y continúan siendo atractivas después de horas de juego. Con la participación de músicos como Danny Baranowsky, Jules Conroy y Alex Moukala, la música mantiene el ritmo y la energía de principio a fin. Si alguna vez has soñado con crear tu propio portal rítmico, Rift of the Necrodancer lo hace posible. Con el soporte para Steam Workshop, puedes crear tus propios niveles y compartirlos con la comunidad. ¡Incluso podrás usar la misma herramienta que los desarrolladores para crear el juego!
A pesar de las fortalezas evidentes, Rift of the Necrodancer presenta un reto importante: su dificultad. Aunque no es un obstáculo insuperable, los picos de dificultad pueden ser frustrantes. Los niveles fáciles no son divertidos debido a la falta de notas, y a medida que avanzas, necesitarás practicar bastante para superar los niveles más difíciles, lo que puede volverse repetitivo. Sin embargo, este desafío también le da al juego su carácter, y no se puede negar que está diseñado para mantenernos comprometidos.
The Review
Rift of the Necrodancer
A pesar de sus dificultades, Rift of the Necrodancer es un juego sumamente entretenido. Su banda sonora ecléctica, su estilo visual único y la posibilidad de crear contenido personalizado hacen que el juego se sienta fresco y emocionante. Los nuevos portales rítmicos, junto con los desafíos diarios, aseguran que haya algo nuevo siempre que se juegue. Rift of the Necrodancer es una variación fantástica sobre el tema de Crypt of the Necrodancer y, sin duda, un excelente juego de ritmo que no puedes dejar pasar.