Two Point Studios ha expandido su serie iniciada en 2018, sorprendiendo a sus fans esta vez con la creación de un museo en Two Point Museum. Pero, ¿vale la pena interesarse por este nuevo título? Aquí te ofrecemos nuestra reseña. Después del éxito de Two Point Hospital, los desarrolladores británicos lograron revivir el género de las estrategias económicas con un toque de humor. Aunque Two Point Campus también fue bien recibido, los creadores sabían que, para seguir cautivando a su audiencia, debían diversificar la jugabilidad. Así nace Two Point Museum, una entrega que a primera vista no estaba clara, pero que rápidamente se destaca por su innovador gameplay y temática fresca.

Al igual que sus predecesores, el juego ofrece dos modos principales de juego. La campaña introduce al jugador a las mecánicas básicas y, conforme avanzas, se presentan desafíos más complejos que resaltan la variada jugabilidad. Para quienes prefieran un enfoque más libre, el modo sandbox permite personalizar la experiencia de juego, aunque inicialmente me incliné por seguir el ritmo pausado de la campaña para familiarizarme mejor con las novedades. En la campaña, el jugador asume el rol de gerente de un museo, y tiene la libertad de diseñar museos temáticos: desde convertir un hotel embrujado en una atracción para los amantes de lo paranormal, hasta diseñar un acuario repleto de criaturas marinas. La gran flexibilidad para elegir la temática del museo es uno de los puntos fuertes del juego, aportando una frescura que quizás faltaba en Two Point Campus.

La administración comienza con tareas básicas como crear una taquilla, contratar personal adecuado, y colocar los primeros objetos en exhibición. A medida que el museo gana popularidad, el reto aumenta: gestionar la seguridad, mantener las instalaciones limpias, y asegurarse de que los visitantes tengan áreas para descansar, comer o comprar recuerdos. Aunque estas mecánicas recuerdan a las de Two Point Hospital, Two Point Museum introduce nuevas dinámicas que enriquecen la experiencia, como las expediciones. Uno de los aspectos más interesantes es que, además de gestionar el museo, los jugadores pueden enviar a su equipo de especialistas en expediciones. Estas aventuras son esenciales para conseguir nuevos objetos para las exposiciones, y van desde capturar fantasmas hasta descubrir raras especies marinas. El éxito de estas misiones depende del equipo, las herramientas utilizadas y las decisiones tomadas en el camino, lo que añade una capa de estrategia y progresión muy entretenida.

Las expediciones no solo son una fuente de nuevos objetos, sino que también ofrecen misiones más complejas, algunas de ellas con dilemas morales. Esto mantiene el interés y hace que los jugadores quieran seguir avanzando para descubrir más secretos y artefactos únicos. El sistema de progresión está muy bien diseñado, ya que constantemente impulsa al jugador a mejorar su equipo y sus habilidades, lo que resulta clave para enfrentarse a desafíos más complicados. Aunque la mecánica de proteger el museo de ladrones añade una capa extra de dificultad, a veces sentí que esto podía interrumpir el flujo del juego, especialmente cuando el presupuesto era limitado. A pesar de ello, estas pequeñas adiciones reflejan la intención de los desarrolladores de crear una experiencia más profunda y variada. Uno de los elementos que se mantienen constantes en la serie es el humor. Two Point Museum no se toma demasiado en serio, y ofrece divertidos momentos tanto con los visitantes como con el personal del museo. Aunque no llega a los niveles de comedia de la primera entrega, sigue siendo un componente fundamental que añade encanto al juego.

El modo sandbox es donde la verdadera libertad brilla. Puedes personalizar casi todos los aspectos del museo, desde la temática hasta la dificultad, lo que permite ajustar la experiencia según tus preferencias. Si prefieres un juego más relajado, puedes simplemente disfrutar del proceso creativo sin la presión de cumplir objetivos, o bien puedes optar por desafíos más exigentes. La jugabilidad de Two Point Museum es altamente adictiva. No es un juego para completar en una sola sesión; la profundidad de sus mecánicas y la variedad de opciones disponibles garantizan que pasarás muchas horas construyendo y gestionando tu museo ideal. El aprendizaje es constante, y siempre hay algo nuevo por descubrir o mejorar, lo que lo convierte en una experiencia gratificante a largo plazo.
En cuanto al control del juego, incluso en consolas, Two Point Museum ofrece una excelente usabilidad. La interfaz es intuitiva, permitiendo a los jugadores diseñar sus museos sin complicaciones, y las herramientas de personalización, como la elección de paredes o pisos, añaden un nivel de detalle que no habíamos visto en anteriores títulos de la serie. Si disfrutaste de los títulos anteriores, Two Point Museum te ofrecerá una experiencia renovada, llena de humor, desafíos estratégicos y la oportunidad de crear el museo de tus sueños.
The Review
Two Point Museum
Two Point Museum es una continuación inteligente de la serie que no solo expande su universo, sino que lo enriquece con nuevas y emocionantes mecánicas. Los desarrolladores han escuchado a su comunidad, evitando caer en la repetición y logrando implementar innovaciones que aportan frescura al núcleo del juego. Aunque hay momentos en los que desearías que el progreso fuera un poco más rápido, el conjunto es lo suficientemente sólido como para mantenerte enganchado durante horas.