La campaña de marketing para el remake de Resident Evil 4 ya comenzó, pero eso no significa que Capcom haya terminado con Resident Evil Village, la última obra se beneficiará de un nuevo foco de atención gracias a la llegada de la Gold Edition, así como la Winters Extension. Compuesto por varios contenidos adicionales, ofrecerá un DLC narrativo, Shadows of Rose, que presenta a la hija de Ethan 16 años después de los eventos del juego.
Así que aquí estamos dieciséis años después del final de Resident Evil Village, Rosemary «Rose» Winters, ahora una adolescente, intenta lo mejor que puede vivir una vida normal a pesar de la presencia de sus poderes, lo que ella ve como una verdadera maldición, sin embargo, cuando uno de sus parientes le informa que puede haber encontrado una manera de deshacerse de él, la esperanza renace, pero para hacer esto, la joven debe aceptar entrar en la conciencia de Megamycete, un lugar particularmente peligroso del que podría nunca regresar, Rose dispuesta a hacer cualquier cosa para deshacerse de sus poderes que la ha perseguido desde su nacimiento, acepta de todos modos, fue entonces cuando comenzó para ella un viaje introspectivo particularmente de pesadilla.
Con una dimensión psicológica más fuerte que la campaña principal, Shadows of Rose nos sumerge en un mundo donde descubrimos los miedos y ansiedades de la hija de Ethan, a quien rápidamente terminamos apegados. Sin embargo, ella no está totalmente sola en esta terrible experiencia ya que una extraña entidad llamada Michael no duda en ayudarla durante toda la aventura, lo que a veces da lugar a pequeñas interacciones bastante conmovedoras. Y si pudiéramos decir que este DLC no era fundamentalmente esencial en sí mismo, aún debemos admitir que logra dar una conclusión conmovedora al arco de la familia Winters, al tiempo que nos ofrece una nueva mirada al epílogo del juego.
Hablando de nuevos looks, debes saber que Shadows of Rose no busca muy lejos para el diseño de su aventura ya que se conforma con apoderarse de entornos ya transitados en Resident Evil Village, dicho esto, no esperes tener la impresión de estar en territorio totalmente dominado ya que Capcom ha hecho un trabajo notable en la atmósfera, por lo que la experiencia finalmente sale bastante diferente. El Castillo de Dimitrescu, sumido en la oscuridad e invadido por el moho, nos parece así mucho más opresivo mientras que la Casa Beneviento, ya terrorífica en base, ha sido completamente trascendida aquí para ofrecer una de las secuencias más memorables de la franquicia. Sí, solo eso, nos atrevemos a decirlo.
Con una duración de unas tres horas, este DLC también puede presumir de ofrecernos una experiencia perfectamente equilibrada entre exploración, acción y reflexión, con unas secuencias de juego muy bonitas. Tenga en cuenta también la adición de una nueva mecánica de juego, los poderes de Rose, que le permiten destruir núcleos de moho para liberar pasajes y objetos, contraatacar enemigos o ralentizarlos temporalmente. Este probablemente no sea el elemento más trascendente de esta expansión, pero aun así permite traer un enfoque diferente durante ciertas confrontaciones que pueden ser bastante musculosas, porque sí, en diferentes situaciones se nos presentan enemigos numerosos y no necesariamente para saludarnos.
Por lo demás, Shadows of Rose permanece, como era de esperar, en la continuidad directa de Resident Evil Village, desde un punto de vista visual en particular, el RE Engine una vez más logra hermosas maravillas para resaltar los cambios en la dirección artística del lugar. Por otro lado, cabe destacar que el manejo de Rose parece un poco más lento y un poco más pesado que el de Ethan, lo que sin duda contribuye a acentuar su fragilidad y aumentar el estrés durante ciertas secuencias, pero también a causar un poco de frustración durante la exploración.
The Shadows of Rose fue una agradable sorpresa, si bien se basa en los logros de Resident Evil Village, esta expansión logra ofrecer una experiencia renovada gracias a un cambio de atmósfera magistralmente controlado y, sobre todo, algunas secuencias de juego muy bien pensadas. Sin mencionar que también trae una conclusión conmovedora a la tragedia familiar de los Winters, cuyo destino fue más inesperado hasta el final.